¿Son las drogas únicamente aquellas sustancias tóxicas que se ingieren, fuman o inyectan? Lo cierto es que no. Existe otro tipo de drogas tan peligrosas o más que cualquier sustancia y que se reflejan en conductas o comportamientos de la persona como la ludopatía o adicción al juego, la compra compulsiva o desmedida sin necesidad, la adicción al sexo o a las nuevas tecnologías, apuestas, etc.
Es cada vez más evidente que la imagen de adicción asociada a una droga o sustancia se está dejando atrás para dar paso a un fenómeno o concepción de la adicción como algo más amplio, más allá de algo externo como el hecho de ingerir ciertos tóxicos, y por tanto algo más relacionado con lo personal o psicológico.
Las adicciones comportamentales o no tóxicas.
Hablamos de adicciones comportamentales o conductuales. Aquellas donde el objeto del consumo se orienta a actitudes, comportamientos, relaciones con personas u objetos.
Las adicciones comportamentales, también llamadas adicciones sin droga o no tóxicas, abarcan esos problemas de dependencia en los que no se ingiere nada. Se trata de adicciones que pueden causar tantas consecuencias y tan graves o más que las drogadicciones. La compra compulsiva, la dependencia emocional (adicción a otras personas), la adicción al trabajo, internet, smartphones y redes sociales, incluso algo en principio tan saludable como hacer deporte, está reportando ya casos de personas con problemas de abuso y dependencia.
La ludopatía o juego patológico.
La ludopatía es uno de los trastornos adictivos con más historia y, posiblemente, uno de los más destructivos en general. De hecho, el juego patológico es la única adicción comportamental hasta la fecha incluida en la clasificación de adicciones por las evidencias neurocientíficas que permiten equipararla a cualquier otra adicción a sustancia.
Por su parte, también aparece en el DSM-V, el sistema de clasificación de trastornos mentales con mayor aceptación, tanto para el diagnóstico clínico como para la investigación y la docencia a nivel mundial.
Síntomas de la ludopatía.
Las personas que sufren este trastorno presentan una serie de comportamientos típicos de la adicción al juego:
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• El deseo es insaciable. El ludópata necesita jugar cada vez más para conseguir la misma sensación.
• Ausencia de autocontrol. Cuando comienzan a jugar ya no pueden parar.
• Malestar cuando no puede jugar. El conocido como síndrome de abstinencia aplicado al juego.
• Seguir jugando a pesar de ser consciente de las terribles consecuencias negativas.
Consecuencias de la ludopatía.
La ludopatía puede llegar a ser más destructiva que otras adicciones con sustancia, puesto que en su forma de uso y abuso no ofrece límites. Por ejemplo, una persona alcohólica, o cocainómana, puede tener un límite en su consumo a lo largo de una noche de fiesta. Este límite vendrá dado principalmente por el agotamiento físico y la saturación en el consumo. Sin embargo, un ludópata puede no tener límite en su juego, y allí donde un cocainómano puede haberse gastado 150 o 200 euros en una noche de consumo intenso, un ludópata puede llegar a jugarse miles de euros en sólo unas horas, y estar todavía dispuesto a jugarse más si puede.
En el caso de una persona con problemas de juego patológico, el daño se origina rápidamente y con consecuencias terribles e inmediatas para ellos y para todos quienes les rodean. Produciéndose un deterioro psicológico muy amplio que desde ADICTIA entendemos es esencial abordar lo más tempranamente posible.
Desde nuestro centro de tratamientos de las adicciones en Alicante, te invitamos a conocer los diferentes métodos de tratamiento personalizado que han demostrado su eficacia para resolver los diferentes problemas de adicciones comportamentales o no tóxicas. Cada persona es única y cada adicción tiene sus propias particularidades. Es por ello que, si lo deseas, te asesoramos en la búsqueda de soluciones personalizadas para ti.